domingo, 18 de agosto de 2013

Lágrimas de Sangre

Estas semanas fueron horribles, ya Katy me había dicho que había una parte de la sociedad vampírica que no estaba tan buena como todo lo demás que implicaba pertenecer a ella. No lo había entendido bien cuando me lo explicó, sino recién ahora cuando lo estoy viviendo por mí misma... 
Si tengo que poner en palabras cómo me siento ahora, además de asustada, lo que es obvio, me duele mucho más sentirme abandonada. 
Shun está conmigo y no me va a dejar, y sé que le preocupa mi seguridad, pero también sé que no va a poder hacer mucho más que yo para pelear contra ellos. 
Pero no me puedo quedar encerrada acá, nada impide que vengan a buscarme y matarme en mi casa, tampoco puedo estar mucho tiempo sin alimentarme, casi mato a un pobre chico cuando me alimenté después de siete días sin hacerlo. Por suerte vino la ambulancia a tiempo y se lo llevaron a un hospital...
Fui una ingenua, eso es lo que fui, pensé que estar entre los míos era igual que estar entre amigos, la realidad es que en este mundo a todos solo les importa sobrevivir por sí mismos y no les importa si en el camino tienen que aplastar a otros. Así son las cosas... 
No sé como entender la actitud de Katy en esto, sé que estoy metida hasta el cuello porque ese Toreador al que están buscando para matarlo fue su pareja en algún momento del pasado... pero yo jamás la dejaría sola en una situación como esta... Jamás la dejaría sola si alguien quiere hacerle daño aunque eso signifique que yo también esté en peligro. No entiendo, ¿no confía en mí? Pensé que lo hacía, o eso sentí todo este tiempo... ¿o quizás es una prueba? ¿Por qué me deja sola en los peores momentos que me tocaron vivir como vampiro? ¿Por qué me dice que me rodee de mis amigos cuando es obvio que no los tengo? Y sabe que si los tuviera no los pondía en peligro... 
Shun también dijo que tengo que estar con otros de mi gente que me puedan ayudar, pero ¿qué me garantiza que lo hagan, si ni Katy lo hace? Una vez más solo me queda pensar que esto es una prueba para ver qué tan bien me desenvuelvo en "nuestra sociedad".
Por suerte, de todas las personas que conocí en el Eliseo llamé a Arleen, ella me había caído muy bien, incluso había ido a su bar. No había ido esos últimos días porque no quería traerle problemas, yo sabía lo peligroso que era para mí y los que me rodeaban haber visto a Gabriel con el Tremere, Dante era su nombre, hacer negocios en medio de mi show, no solo estaba en peligro mi pellejo sino el de todas las personas que tuviera alrededor. El Sheriff se lo tomó como si nada, lo único que le preocupa es cazar él a ese tipo, el primer día vino Erica para ser mi seguridad, pero después me dijo que sino me habían ido a buscar la primera noche seguro ya no lo hacían, como si yo pudiera quedarme tranquila con eso... Me mandó un mensaje varios días después preguntándome si estaba bien, pero a mi respuesta "No, pero bueno" ni siquiera vino a verme... Aunque es lógico, no va a querer involucrarse en un problema como ese si su sheriff no se lo ordena.
Arleen fue la única que se preocupó por mí y cuando le mandé un mensaje preguntándole donde nos podíamos ver que no fuera en su bar me dio un lugar al que me iba a pasar a buscar.
Me llevó a un partido de los Red Socks, dijo que era más seguro si había más gente alrededor. Resulta que ya había estado hablando con Erica que le había contado mi situación y con Charles, al que supuse que le había contado Erica. Arleen me dijo que ya tenían el video de seguridad de mi concierto, estaban tratando de buscar la imagen donde se veía a Gabriel y a Dante "haciendo negocios". Parece que ella había sido policía, o algo más complicado que no me quiso decir, y yo tampoco le iba a preguntar, el pasado era parte de su vida, y no tenía por qué decirme nada, ya bastante  que me estaba ayudando.
Pero no fue eso solo lo que me dijo... había buscado en las bases de datos información mía, no sé cómo la encontró porque yo había estado bastante tiempo buscando datos de mi pasado y no había llegado a nada... Me mostró la información en su celular, hacía tres años mis padres habían muerto en un atentado terrorista. Que ellos estuvieran muertos es algo que ya suponía, porque no me habían contactado una vez que me volví famosa. Lo extraño es que yo solo recordaba los últimos dos años, ¿dónde había estado ese año en blanco? Y lo más extraño de todo era que la persona que estaba cumpliendo condena por ese atentado era Hanibal, el vampiro que había visto en el Eliseo hacía pocas semanas...
Todo era muy confuso, yo había sido en otro tiempo Joan, una chica normal, con amigos que me buscaron hasta que seguramente me dieron por muerta en el atentado... En un momento pensé en que quería buscarlos, a los que habían sido mis amigos, preguntarles cómo era yo antes pero... no puedo hacer eso ahora, con todo esto que me está pasando solamente los pondría en peligro. Es mejor que sigan creyendo que estoy muerta. 
Arleen me dijo que tenía que esconderme hasta la reunión en el Eliseo, ya sabía que no podía faltar, porque iba a quedar mal y solo más envuelta en sospechas, pero hasta ese momento no tenían que verme. Me dio una dirección y le dijo a Shun que solo use teléfonos seguros. Él enseguida entendió. Cuando Arleen me preguntó quiénes tenían mi teléfono le respondí que todos, le había dado mi telefono a toda la comunidad vampírica de Boston, o al menos a todos con los que había hablado y conversado, que habían sido varios. Ella me dijo que apagara el celular, lo hice después de mandarle un mensaje a Kevin diciéndole que iba a estar componiendo esa semana que no me preparara ningún show.
Pensé que después de ese pequeño tiempo con Derek, los momentos en que más sola me sentí y él fue lo único que tuve, no iba a volver a sentirme así y sin embargo, en esos momentos estaba más sola que nunca... más sola que cuando perdí la memoria y no tenía a nadie más que a Derek ¿este era el destino de una vida eterna? ¿pasarla solos? ¿Estar con otros pero solo de forma superficial sin poder confiar en nadie y sin estar realmente con nadie? Eso es muy triste... 
Estuve el viaje en taxi sin decir nada, cuando llegamos al lugar al que Arleen nos había enviado miré el lugar desconocido y mi celular apagado, pensé que Katy no me iba a poder encontrar, y después pensé que seguramente no iba a intentar hacerlo... eso me hizo llorar, y sentí que Shun me llevaba adentro rápidamente ocultándome de la vista de todos, cuando entré me di cuenta por qué, fue la primera vez que me di cuenta de que los vampiros lloramos sangre.
*****

"Necesito mi violín..."

Me daba miedo quedarme sola, pero quería tocar, componer, necesitaba abstraerme de todo eso o iba a explotar. Pensar que a Katy no le importo nada, que me dejó sola... no, no puedo pensar en eso...
-Shun... ¿me vas a buscar mi violín?
-¿Estás segura? ¿Te vas a quedar sola?- me preguntó sorprendido. Estaba abrazada a él y no lo había soltado desde que habíamos llegado al refugio de Arlene.
-Sí, es un rato nada más, necesito distraerme con algo...
-Está bien
Lo solté y vi como agarró su campera de cuero, se la puso y salió por la puerta.
El silencio de la habitación se clavó en mis huesos, era una habitación grande, los muebles eran de color blanco, las ventanas estaban polarizadas, pero podía verse hacia afuera.
Tenía miedo, sentía que en cualquier momento alguien iba a romper una de esas ventanas e iba a acabar conmigo... ese Gabriel, o Dante, o quien fuera... no podía confiar en nadie ahora...
¿Cómo iba a hacer para vivir con ese miedo constante? No quiero vivir teniendo miedo...
Shun volvió a los veinte minutos. Tenía mi violín y había traído algo de ropa para él y para mí. Había sido rápido.
-¿Estás bien?
-No... tengo miedo...
-¿Por qué no te das un baño? Te va a ayudar a relajarte, yo voy a quedarme atrás de la puerta, lo prometo.
-Esta... bien...
Arlene tenía una hermosa casa, tenía una bañera grande, y había sales de baño y jabón líquido importado. Puse de ambos en la bañera y me metí en el agua tibia.
Recordé mi primer día como vampiro, fue en esa cabaña con Katy, era una zona de caza de venados, y las cabañas estaban aisladas una de la otra, así que estábamos solas. No hacía frío, a pesar de que era invierno había una estufa a leña encendida en una de las esquinas. Había un televisor bastante viejo y un reproductor de DVDs que todavía funcionaba, habíamos puesto "El resplandor" de Stanley Kubrick y Katy había llevado pochoclos para mí a pesar de que ella no podía comerlos.
"Siempre me gustaron los pochoclos, es una de las cosas que más extraño comer" me dijo.
No terminamos de ver la película, porque ella empezó a darme besos en el cuello y se alimentó de mí como tantas otras veces ese último año, y yo adoraba que lo hiciera. Nunca me había sentido tan bien con alguien, lo que sentía por Katy era tan difícil de explicar como que yo sintiera eso por una mujer cuando nunca me habían interesado, al menos en lo que podía recordar de mi vida. Quizás pudiera resultar inexplicable, o quizás era una especie de hechizo lo que causaba en mí su presencia, no lo sé, pero puedo asegurar que jamás me sentí así con ninguna otra persona, salvo cuando estoy con ella. ¿A ella le pasará lo mismo conmigo?
Lo recuerdo como si hubiera sido ayer mismo...
"Vamos, tenemos que llegar cerca de la otra cabaña"
La tele quedó encendida cuando nos fuimos. Era noche cerrada y no había nadie afuera, me costaba incluso mirar por donde iba, pero Katy me había agarrado de la mano y yo la seguí ciegamente, como desde que la había conocido.
Me llevó hasta una cabaña en donde dos chicos estaban mirando una película, tal cual hace unos minutos lo estábamos haciendo nosotras. Nos alejamos apenas unos metros de allí. Katy me explicó que iba a necesitar alimentarme después de que ocurriera, y que había elegido a esos chicos como objetivo. 
"¿Te acordás bien de lo que te conté?" me preguntó.
"Sí, vas a beber de mi sangre hasta que ya no quede nada en mí y después me vas a dar de beber tu sangre"
Ella se acercó a mí y me dio un beso en el cuello, sentí apenas el roce de sus colmillos y luego esa marea de sensaciones que ya conocía y que tanto me gustaba. Era muy placentero y esta vez estaba durando mucho más... 
Siempre había confiado en Katy, le confié mi primer vida y después le confié también la segunda. Jamás se me ocurrió tenerle miedo, al contrario, mi amor hacia ella era tal que hasta me era complicado entenderlo. Sentí como mi cuerpo se iba a apagando y solo quedaba esa hermosa y placentera sensación que me inundaba... y continuó hasta que otra sensación igual recorrió mi cuerpo al beber su sangre. Esto había sido lo que siempre había deseado desde que nos conocimos, que fuéramos una. No sé cuanto tiempo pasó desde que empezó hasta que terminó, cuando volví a tener conciencia de ese nuevo mundo que me rodeaba, estaba acostada en el pasto, con la cabeza apoyada en el regazo de Katy y ella me estaba acariciando el pelo...
¿Cómo pudiste olvidar todo eso? ¿Cómo pudiste dejarme así? 
Otra vez estaba llorando, en el agua ya habían caído varias lágrimas de sangre. 
-Lindsey ¿estás bien? ¿me escuchás?
-Sí... ya salgo...
Me limpié la cara y me puse una bata que estaba colgada de un perchero. Me abracé otra vez a Shun y él me llevó hasta el sillón una vez más.
-¿Estás mejor?
-Un poco...
-¿Querés tocar?
Tocar el violín siempre me alegraba, así que agarré el estuche y lo saqué y empecé a tocar. Shun se quedó escuchando atentamente.

*****

Estaba concentrada componiendo un nuevo tema que cuando tocaron a la puerta, tuve tal pánico que me quedé inmóvil varios minutos, y volvieron a tocar... una mujer me llamó por mi nombre del otro lado, pero no quería abrir... Shun estaba cerca mío, dispuesto a saltar sobre quién fuera entrara a la casa.
No conocía la voz, pero me habló tan amablemente que antes de darme cuenta ya le había abierto la puerta.
El nombre de mi visitante era Cassandra y me dijo que había ido porque sabía de mi situación y me contó que a ella también le había pasado una vez, y no quería que estuviera sola... no parecía estar mintiendo... y como le dije a Arlene cuando la llamé por teléfono, si me hubiera querido matar nada le hubiera impedido hacerlo... 
Arlene me dijo que en las grabaciones que habían mirado con Charles no había nada, así que estábamos igual que al principio, era mi palabra contra la del tremere... 
Cassandra no me preguntó nada de lo que había pasado, simplemente estuvo conmigo, por lo que me dijo, Anton sabía lo que me había pasado y ella decidió venir a verme. Me pregunté cuántas personas más lo sabrían... Aparentemente los que les habían avisado a ellos dos habían sido los Nosferatu pero yo nunca había visto a ninguno de ellos y no habían ido al anterior eliseo...
Cassandra estuvo conversando conmigo esa tarde y me ayudó a olvidarme por un tiempo de todo ese asunto... pero cuando se fue volví a recordar todo nítidamente y volví a preocuparme por Katy... Ese tal Gabriel todavía estaba dando vuelvas por ahí... esperaba que Katy tuviera a alguien que la ayudara, alguien que estuviera con ella para que no estuviera sola si algo pasaba... Solo me tranquilicé un poco cuando pensé que quizás Derek estuviera con ella.


Los chicos de la banda. Derecha Drew - Izquierda: Gavi

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